A finales del siglo I a. C., el emperador romano Augusto
inició la construcción de un par de calzadas que unían
Caesar Augusta (Zaragoza) con Pompelo (Pamplona) a
través de las Cinco Villas, una por el norte de la comar-
ca y otra por la zona central. Estas importantes vías de
comunicación, sumadas a la riqueza agrícola de la zona,
hicieron de las Cinco Villas una zona intensamente romanizada,
como testimonian los restos del entorno de Sádaba, donde se conservan
varios monumentos funerarios, y el conjunto arqueológico de Los Bañales.